Magnífica balconada sobre el río, donde se mantiene como un símbolo la chimenea de ladrillos que perteneciera al antiguo saladero "La Conserva". "..El Arquitecto Armando I. Barbieri, planeó y realizó el homenaje a ese pasado de trabajo y de empresa que representaron los saladeros. Lo hizo aprovechando los propios vestigios de la fábrica. Así quedó erigido el símbolo. Una de las Chimeneas de "La Conserva", que tantas veces anunció la hora de la labor, se corona con la efigie de una res. En el anfiteatro frente al río, no hay más que este mástil, erguido, como si todo alrededor le sirviera sólo de escenario. Fuerza evocativa dentro de su desnudez, tiene, la obra, obediente a un deseo de evocación y de justicia a los recios varones que impulsaron la grandeza salteña.